Te has preguntado alguna vez,
de dónde procede la tradición de pedir un deseo al ver pasar una estrella
fugaz?
Esta costumbre ya era muy popular entre las civilizaciones más
primitivas. Sus habitantes creían firmemente en la relación entre estos cuerpos
celestes y el alma de las personas. Cuando se esperaba la llegada de un recién
nacido, las estrellas volaban por el firmamento hasta llegar al hogar
bendecido. Una creencia que podría remontarse a las sagradas escrituras.
Recordemos que la Biblia narra entre sus páginas como una hermosa y monumental
estrella guio a los Tres Reyes Magos, hasta el pesebre donde la Virgen María
había dado a luz. Esta historia provocó que las generaciones venideras
considerarán las estrellas fugaces como un símbolo de buena fortuna.
Sin embargo, la relación entre los deseos y este tipo de astros es
mucho más potente, gracias al astrónomo Claudio Ptolomeo. Este creía que las
estrellas fugaces procedían del reino de los dioses, abriendo con su llegada
una puerta a la comunicación. Así, los mortales tenían una posibilidad de
mandar sus ruegos y plegarias a estos seres de gran poder e influencia. Un
proceso que debía realizarse con éxito antes de que la estrella desapareciera
en la inmensidad del cielo. Y Vos, ¿has tenido alguna vez la suerte de cumplir
tus más profundos deseos?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario