La mujer de ayer se relegaba a ser esposa y madre. Sin tener derecho a
tener un trabajo o conseguir un sueldo superior al de un varón.
La mujer de ayer no podía votar o tener una propiedad. El papel de la
mujer de ayer en la cultura, ha cambiado en medida a los tiempos y la lucha
constante de la mujer misma por hacer el cambio.
A pesar de que en los últimos años el papel de la mujer dentro de la
sociedad ha ido en aumento y con aceptación por parte de la comunidad
masculina, aún existe el maltrato, la desigualdad en cuestión a salarios y
puestos de trabajo por el simple hecho de ser mujer.
En países como el medio Oriente se da casos de maltrato hacia la
mujer, donde algunas mueren lapidadas como parte del castigo que merecen por
delitos en contra del varón, entre ellos la infidelidad. En otros como África,
miles de niñas son castradas como parte de la cultura del país. En China, las
mujeres son una carga para la familia. Por lo que muchas niñas son dejadas
morir desde el momento de nacer y más aún por la ley de dos hijos por familia,
donde sí se debe escoger, se prefiere al varón que a la niña.
En nuestro país, aún existen comunidades donde las mujeres viven en el
ayer, donde son vendidas al mejor postor desde niñas a cambio de licor o
ganado. Donde no tienen derecho más que servir en el hogar y tener hijos.
La mujer de ayer era señalada, si no tenía hijos. La mujer de Hoy, es
mujer por el simple hecho de ser mujer, no por tener hijos.
Lamentablemente la mujer de hoy no aprovecha las oportunidades que han
logrado conseguir las mujeres de ayer. La mujer actual enfrenta mayores retos
que la mujer de ayer.
Cuando la mujer de ayer no tenía derecho de estudiar, muchas
jovencitas dejan los estudios por “seguir” el boom de la juventud, debido a que
como mujeres hemos olvidado orientar correctamente a nuestras hijas para ser
mujeres del futuro, preparadas a los nuevos retos.
Cuando la mujer de ayer no tenía derecho de trabajar y tener un sueldo
propio; la mujer de hoy ha descuidado su hogar por confundir ser “Igual” al
hombre y descuidar a los hijos, y su relación de pareja, por “su trabajo”.
Ante esto, la mujer de Hoy debe
tener visión al futuro. Debe a pesar de lo complicado de su trabajo, ser
madres, esposas y profesionales.
Ser profesional no significa
dejar de ser mujer.
Con los nuevos retos, somos las mujeres de hoy quienes podemos hacer
diferencia en el futuro.
Las mujeres de Hoy debemos educar a los hijos varones con disciplina e
igualdad con las hijas, para que no sean en el futuro hombres machistas,
golpeadores de esposas y padres des obligados.
Somos las mujeres de hoy, quienes debemos educar y orientar a las
hijas a comprometerse con su futuro, formándolas con valores y metas, que les
permita vislumbrar más allá de solamente tener “Un novio”, sino ser mujeres
profesionales, que realicen cambios que
mejoren su mañana.
Somos las mujeres de hoy quienes debemos estar comprometidas con
mejorar la calidad de vida familiar y
fomentar un futuro sano para nuestros hijos.
Somos las mujeres de hoy, quienes debemos continuar preparándonos como
profesionales, alcanzando metas propias, que sean un orgullo para la familia.
Somos las mujeres de hoy, quienes rompemos la cadena de maltrato y
violencia familiar.
Somos las mujeres de Hoy, quienes sin una pareja que nos apoye sacamos
adelante a los hijos con un trabajo digno, dándoles ejemplos sanos de
superación profesional.
Somos las mujeres de hoy quienes conducimos a los hijos a un sano
desarrollo espiritual y quienes somos el brazo fuerte del esposo y la voz de la
sabiduría en los hijos.
La mujer de hoy no se da por vencida ante los retos y las injusticias.
La mujer de Hoy, Trabaja, lucha, transforma y cuida su hogar.
La fuerza de la mujer de Hoy es
que, no se compara con la fuerza del varón, pero que saca fuerzas de donde no
las hay, si se trata del cuidado y protección de los hijos. Esta misma fuerza
es la que nos permite lograr cosas que no nos imaginábamos.
La mujer de hoy debe evitar involucrarse en actos de violencia, como
lamentablemente vemos en la actualidad, donde el papel de la mujer se ve unido
a la delincuencia, maltrato, secuestro,
soborno y homicidio.
La mujer de hoy no debe olvidar que el feminismo (la lucha de igualdad
de los derechos entre la mujer y el hombre), no quita el ser femeninas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario