La receta que hoy les
traigo, me recuerda una anécdota de mi niñez: En casa y en varias ocasiones,
mamá cocinaba Lengua de ternera. Como éramos muchos de familia, mamá se las
ingeniaba para hacer platos con carne, en forma económica y que rindiera. Así
que, de vez en cuando, y para variar un poco, realizaba platos con Mondongo,
riñones, hígado, seso o lengua de ternera.
Este tipo de carnes, no
eran de mucho agrado, para algunas personas; pero nosotros, ya estábamos
acostumbrados, a comer como en un batallón.
Un día, mamá había hecho
la receta que, más abajo detallo, y había venido de visita, a almorzar, una
amiga.
Ésta, le preguntó a mamá,
que estaba cocinando, y respondiéndole con una mentirita piadosa, le dijo, que
era peceto.
Cuando nos sentamos a la
mesa, y sirvió los platos; nosotros los niños, que no sabemos mentir, nos mirábamos
y nos hacíamos señas… hasta que la amiga, dijo: -Uhm! Que rico está!!- y se lo
comió todo, absolutamente todo. Y jamás se enteró, que lo que había comido era
lengua. ¡¡¡Estaba tan blandita que pasaba por peceto!!!
Ingredientes:
1 lengua de ternera
Ajo, perejil (cantidad
necesaria o a gusto)
1 cebollita
3 cucharadas de harina
1 capsula de azafrán
Sal y pimienta a gusto
1 taza del agua de
cocción de la lengua
1 taza de caldo de
verdura
Preparación:
Paso 1: Hiervo en
agua la lengua con un bouquet de hiervas, 1 diente de ajo y una cebollita hasta
que esté tierna. Dejo enfriar en su misma agua.
Paso 2: Pelo la
lengua, corto en fetas regulares y reservo.
Paso 3: En la taza
de agua de la cocción y el caldo de verduras, cocino los ajos y el perejil
previamente picados chiquititos. Retiro de la hornalla y, suavemente, voy
incorporando la harina para evitar grumos; llevo al fuego a cocinar, incorporo
el azafrán, remuevo constantemente, incorporo las fetas de lengua a la crema
antes formada; cocino 2 o 3 minutos más y listo.
Acompaño con puré de
papas, arroz blanco o papas fritas o al horno.
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